Los Decretos en tu vida y en la mia

  SABADO DE ACEPTACION 

ENTREGA ESPIRITUAL

Completando el triduo de los días anteriores a la Resurrección Pascual, amanece el día sábado, recordándonos la triste soledad de María, madre de Jesús.
La soledad, entrega espiritual, con que se sostuvo en esas horas largas y llenas de resignación por Amor a su hijo y a toda la humanidad.
Para estos momentos María virgen necesitó durante los 33 años de vida terrenal de su
hijo, "el ungido", haber encontrado la total armonización con el Espíritu Santo. 
Esto le fue enseñado antes, para que pudiera en esos momentos, alumbrar a Jesús y ayudarle en su misión.
Lo anterior nos habla de cuan importante es sentirnos armonizados en la Fe con Dios para ser guiados, ayudados, y consolados por El. 
Así es que en situaciones de peligro, crisis u oposición, primero, armonicemos nuestras energías al amor y a la gracia del Espíritu Santo, para luego pedir su ayuda y su asisencia
milagrosa. 
En la vida de María no habría tiempo para esto. La Santísima virgen debía estar preparada con la armadura de la Fuerza Espiritual, con la espada de la Ver/dad, con un caudal Infinito de Amor y Misericordia. De aceptación y de compasión, de voluntad y entendimiento.
Los compañeros y discípulos del maestro Jesús habían entendido y aprendido que:
"Cuando estáis en una batalla no podéis dar media vuelta corriendo hacia atrás para poneros la armadura y tomar la espada, pues el enemigo habría emprendido ya su ataque. Tenéis que estar preparados en todo momento y antes del momento".
Nosotros, en este día sábado antes del domingo pascual, podemos "comprender"
para "entender" la importancia de estar armonizados en la FE.
María Madre nos dice:
"la armonización tiene una cierta cualidad subconsciente, comienza con la mente externa, por vuestra suplica, comienza con la Luz de la LLama Trina, comienza por la plegaria al santo ser crístico, para que asuma el mando y continúe las oraciones y decretos de vuestro corazón a lo largo de todo este día"
María nos pide de esta manera y con todo Amor y toda Sencillez :
Con el corazón puesto de manifiesto en el deseo de acompañarme en estas últimas horas de mi hijo, reciten:

*Amada poderosa presencia Yo Soy,
Padre de toda vida ,
Actúa en mi nombre en este día
Ocupa mi forma,
libera la Luz necesaria
para que yo haga tu voluntad.
Y asegúrate de que las decisiones que tome
siempre estén de acuerdo con tu santa voluntad.
Asegúrate de que mis energías se usen
para engrandecer al señor en todo aquel que encuentre,
Asegúrate de que la santa sabiduría que me has otorgado 
se use constructivamente para la expansion del reino de Dios. 
Y por encima de todo, amado Padre Celestial,
te encomiendo mi espíritu
Y pido que así como tu llama, es una, con mi llama
Se unan a tí todos los Hombres de Buena Voluntad.
Que pulse el Amor y la Misericordia en la Tierra
para efectuar la armonización continua en la Fe. 
En el Nombre del Espíritu Santo, la Gracia de tu Santa Presencia, 
y la Madre del Mundo, llamo a mi Maestro Jesus ungido,
para que entre y llene con su Gloria el vacío que hay en mi ser.

A continuación sellar el decreto con la siguiente afirmación:

"Y con plena fe, acepto conscientemente, que esto 
se manifieste se manifieste , se manifieste (x3)
Aquí y ahora mismo con pleno poder, 
eternamente sostenido, 
omnipotentemente activo , siempre expandiéndose 
y abarcando al mundo hasta que todos hayan ascendido 
completamente en la luz y sean libres".
"Amado YO SOY , amado YO SOY, amado YO SOY".

TE ACOMPAÑAMOS MARIA MADRE!!! BENDITA TU ERES